Conflicto entre Donald Trump y Jerome Powell: La Tensión en la Reserva Federal de EE.UU.
La reciente visita del presidente estadounidense, Donald Trump, al edificio de la Reserva Federal, protagonizó un intenso momento de tensión entre él y Jerome Powell, presidente de la Junta de Gobernadores del Sistema de la Reserva Federal. Durante un recorrido por las obras de renovación, Trump mencionó que el costo de las remodelaciones ascendía a 3,100 millones de dólares. Sin embargo, Powell lo corrigió en público, afirmando que la cifra real era de 2,700 millones, generando un intercambio de miradas y palabras que dejó en evidencia las diferencias entre ambos.
Trump, quien lucía un casco de obra, cuestionó a Powell sobre un “tercer edificio”, del cual el presidente de la Fed aclaró que ya se había construido hace cinco años. Este diálogo no solo destacó la falta de coordinación entre el mandatario y la institución económica, sino también la presión que Trump continúa ejerciendo sobre Powell, especialmente desde su regreso al poder en enero. Trump ha manifestado su deseo de que la Reserva Federal reduzca las tasas de interés, lo que ha sido un tema recurrente en sus declaraciones desde que asumió la presidencia por segunda vez.
El entorno económico actual presenta incertidumbres, con una Reserva Federal que ha mantenido las tasas de interés en niveles estables, oscilando entre el 4.25% y el 4.50%. Trump, en cambio, ha criticado a Powell por no bajar las tasas, lo que, según él, ha afectado la capacidad de compra de muchas familias. Comparando el accionar de la Fed con el del Banco Central Europeo, que ha estado reduciendo progresivamente sus tipos de interés, el presidente estadounidense está enfatizando su postura de que necesita un cambio en la política monetaria para estimular la economía.
A pesar de la polémica suscitada durante la visita, Trump negó que había “tensión” y afirmó que no había presionado para que Powell dimitiera. Sin embargo, los rumores sobre un posible despido del presidente de la Fed han cobrado fuerza, especialmente tras las críticas de Trump hacia Powell y sus insinuaciones de fraude relacionado con las obras de la institución. Despedir a Powell sería un acto sin precedentes y requeriría pruebas de faltas graves, lo que complicaría la posibilidad de que Trump lleve a cabo dicha acción.
Además, el secretariado del Tesoro, Scott Bessent, anunció la realización de una auditoría a la Reserva Federal, generando aún más incertidumbre sobre el futuro de la relación entre el presidente y la Fed. Esta auditoría podría tener implicaciones significativas en la independencia de la Reserva Federal, una institución que, en teoría, debería estar libre de presiones políticas, pero que parece estar cada vez más bajo el escrutinio del gobierno actual.
La tensión entre Trump y Powell se produce en un contexto de crisis gubernamental, en medio de las críticas hacia Trump por su manejo de casos delicados como el de Jeffrey Epstein. Al intentar desviar la atención pública de estos asuntos con ataques a la Fed, el presidente de EE.UU. busca reafirmar su autoridad y controlar el narrative económico, pero el costo de este conflicto podría impactar significativamente tanto a los mercados financieros como a la economía nacional en el futuro.