Hostigamiento a Defensores de Derechos Humanos en Venezuela: Caso de Andreina y Margareth Baduel

En los últimos meses, el Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos ha hecho sonar la alarma sobre el hostigamiento al que han sido sometidas Andreina Baduel y su hermana Margareth, así como sus familias. Estas continuas agresiones ponen de manifiesto la situación precaria en la que se encuentran aquellos que defienden los derechos humanos en Venezuela, un país marcado por la represión y la violencia sistemática contra los defensores.

Andreina Baduel, destacada periodista y coordinadora del Comité por la Libertad de los Presos Políticos, ha sido un baluarte en la denuncia de las violaciones de derechos humanos que enfrentan las personas detenidas por motivos políticos. La situación se intensificó tras una rueda de prensa realizada el 18 de junio de 2025, donde se denunciaron los abusos relacionados con presos políticos. Desde ese día, la presencia de agentes del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) afuera de su hogar se volvió constante, lo que aumentó el clima de inseguridad y temor para ella y su familia.

La hermana de Andreina, Margareth Baduel, también ha sido víctima de un alarmante acoso. El 25 de junio, reportó seguimientos de vehículos sospechosos y fue perseguida por motociclistas en momentos de alta vulnerabilidad, como cuando estaba con su esposo e hijo. A esta situación se sumó la instalación de alcabalas improvisadas por agentes de la Policía Nacional Bolivariana, que obstaculizaron su libertad de movimiento y agraviaron aún más el clima de angustia e intimidación en su comunidad.

Con el respaldo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que otorgó medidas cautelares a Andreina Baduel, el Observatorio ha exigido a las autoridades venezolanas la implementación de medidas efectivas para proteger a ambas hermanas. Esta intervención internacional es crucial, dado que la CIDH reconoció el riesgo inminente que enfrentan y la urgencia de garantizar su seguridad e integridad.

El Observatorio ha denunciado que el hostigamiento que enfrentan Andreina y Margareth es una represalia directa por sus valientes esfuerzos en la defensa de los derechos humanos en un entorno adverso. La organización ha solicitado no solo la protección de sus vidas, sino también una investigación independiente y el castigo de los responsables de estas acciones intimidatorias. Este llamado a la acción se extiende además al Mecanismo de Protección a Defensores de Derechos Humanos en Venezuela, indicando la necesidad de una respuesta inmediata y efectiva para salvaguardar sus derechos.

En resumen, el caso de Andreina y Margareth Baduel es un reflejo más de la lucha constante de los defensores de derechos humanos en Venezuela. A medida que se intensifican los ataques y la represión, es vital que tanto la comunidad internacional como las autoridades nacionales tomen medidas decididas para poner fin a esta situación alarmante, garantizando así que la voz de quienes defienden la justicia y los derechos humanos no sea silenciada por el miedo.

Compartir.
Deja una respuesta

Exit mobile version