Las elecciones del 25 de mayo en Venezuela: una percepción crítica de la oposición

Ángel Fuentes López, integrante de la Dirección Nacional de Alianza Bravo Pueblo (ABP) y del Comando Nacional con Venezuela, expresó su profunda preocupación sobre las próximas elecciones regionales y parlamentarias previstas para el 25 de mayo. En su opinión, estos comicios representan una trampa política orquestada por el "régimen del terror de Maduro", quienes han convocado un proceso electoral que él considera fraudulento desde su inicio. Fuentes López sostiene que el Consejo Nacional Electoral (CNE) ha actuado de manera ilegítima, ejecutando un "atraco" a la voluntad del pueblo venezolano sin fundamentos válidos, lo que configura un grave delito constitucional y electoral.

Desde el 28 de julio, cuando se llevaron a cabo elecciones presidenciales, la apuesta del pueblo venezolano ha sido clara: un cambio verdadero y sostenible. Fuentes enfatiza que participar en las elecciones del 25 de mayo no solo sería un error, sino que representaría una traición a este mandato. Este análisis profundo resalta el sentimiento de rechazo general por parte de muchos sectores de la sociedad venezolana hacia un gobierno que, según ellos, ha perdido toda legitimidad. La visión de que el futuro de Venezuela está en juego se convierte en el eje central de su argumentación.

El dirigente de ABP subraya que lo imperativo en esta coyuntura no es validar las acciones del gobierno de Maduro, sino atender el clamor de la población. La liberación de los prisioneros políticos, así como aquellos que han sido secuestrados o desaparecidos, es un punto cardinal en su discurso. Fuentes aboga por la justicia para todos aquellos que han sufrido bajo el régimen actual, especialmente en relación con los diplomáticos venezolanos en el extranjero, como los que se encuentran en Argentina.

Fuentes López también se refiere a la necesidad de reconocer los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio, en las cuales él y otros líderes opositores afirman que Edmundo González Urrutia fue el vencedor. Esta demanda no solo establece un parámetro de legitimidad respecto a la oposición, sino que representa un esfuerzo por institucionalizar el reclamo por justicia y transparencia electoral en un país sumido en la crisis.

El líder opositor hace un llamado a la Comunidad Internacional, a los medios de comunicación y a todos los segmentos de la sociedad venezolana. Su petición es clara: no otorgar validez a lo que él denomina una "nueva farsa electoral" y, en cambio, apoyar la lucha por la justicia y la libertad en Venezuela. Este posicionamiento refleja una angustia colectiva, un deseo de resistencia y un reclamo por el reconocimiento de los derechos del pueblo.

Para finalizar, Fuentes concluye que el 25 de mayo no debe verse como un día de elecciones, sino como un acto de resistencia y determinación a favor de la liberación de Venezuela. Su discurso es un llamado a la unidad y a la perseverancia frente a la adversidad que muchos venezolanos enfrentan diariamente. La lucha por la libertad, según él, debe continuar hasta el último momento, reafirmando así la resistencia del pueblo ante un régimen que se niega a escuchar sus voces. En este sentido, el futuro de Venezuela depende no solo del resultado de unos votos, sino del compromiso de su gente por una vida digna.

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