Conservación del Oso Frontino: Un Compromiso Colectivo en Mérida
La conservación del Oso Frontino es una tarea que requiere el esfuerzo conjunto de comunidades, expertos y autoridades. Recientemente, se hicieron importantes avances en la protección de esta especie emblemática en el estado Mérida, donde se entregaron dos cámaras trampas destinadas a su monitoreo. El director del proyecto "Oso Andino Guaramacal", Marcos Hidalgo, destacó la importancia de estas herramientas durante un encuentro técnico enfocado en la protección del oso andino, que se realizó con la participación de guardaparques y otros especialistas.
En este encuentro, además de la entrega de cámaras trampas, se llevó a cabo una capacitación enfocada en el uso adecuado de estas herramientas. Los guardaparques de diferentes estados fueron instruidos sobre cómo realizar un monitoreo efectivo del Oso Frontino. Este tipo de capacitación es fundamental para asegurar que los esfuerzos de conservación sean sostenibles y efectivos, y se complementó con la presentación del proyecto de actualización de la distribución y priorización de áreas para la conservación del oso andino, realizado por el docente Robert Márquez.
El compromiso institucional también estuvo presente a través de la intervención del director regional del Ministerio de Ecosocialismo, Toro Belisario. En este encuentro se destacó el esfuerzo colectivo que ha ido desarrollándose durante los últimos cinco años, subrayando que para 2025 se proyecta un salto cualitativo en materia de monitoreo y censo del Oso Frontino. Belisario enfatizó la necesidad de presentar estadísticas precisas a organismos nacionales e internacionales para validar el trabajo de todos los involucrados en la conservación de esta especie.
Una de las claves del éxito en la protección del Oso Frontino ha sido la activa participación de las comunidades locales. En zonas como Jaji, El Jarillo y El Maporal, los habitantes han tomado la iniciativa de reportar avistamientos y participar en campañas de conservación. Carmen Fabiola Sánchez, coordinadora de la unidad Biológica del Ministerio, mencionó que se han trabajado en 22 circuitos comunales para establecer una red de conservación. Estas comunidades no solo contribuyen a la protección del oso, sino que también fomentan una convivencia armónica con la especie en su entorno.
La biodiversidad de la región andina se refleja en el monitoreo de esta especie, y datos recientes indican que se han registrado múltiples avistamientos de Oso Frontino en el Parque Nacional Sierra La Culata y el Parque Nacional Sierra Nevada. Marcos Hidalgo destacó que existen núcleos poblacionales importantes del oso andino en Venezuela, y enfatizó la necesidad de un marco legal que proteja estos hábitats, como el decreto emitido por el presidente Nicolás Maduro sobre el ramal de Calderas, que busca unificar esfuerzos entre Mérida y Trujillo.
Finalmente, aunque se estima que existen alrededor de 1,546 osos en el país, es importante tratar estos números con cautela, ya que son datos basados en estimaciones y no en censos verificados. En el área de Guaramacal y su conexión con el ramal de Calderas, se han registrado 49 individuos en los últimos ocho años, incluyendo nacimientos recientes. Este avance en la reproducción es un motivo de optimismo para la conservación del Oso Frontino, y subraya la importancia de seguir trabajando en la preservación del rico ecosistema andino.
