El Último Adiós a Rubby Pérez: Un Ícono del Merengue Caribbean
El Caribe se encuentra de luto tras el fallecimiento del reconocido cantante dominicano Rubby Pérez, quien falleció el pasado martes tras quedar atrapado entre los escombros de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, que sufrió un trágico derrumbe. Rubby, símbolo del merengue y adorado por sus compatriotas y fanáticos en Venezuela, dejó un legado musical imborrable en la cultura latina. Su repentina muerte, que ha dejado al menos 225 víctimas fatales, marca un momento de profunda tristeza en la comunidad artística, así como en la vida de quienes fueron tocados por su música.
Antes de que sus restos fueran sepultados en el parque cementerio Puerta del Cielo, en Santo Domingo, su féretro fue cubierto con las banderas de República Dominicana y Venezuela, reflejando la dualidad de su identidad y su conexión emocional con ambas naciones. Rubby Pérez se autodefinió como "dominico-venezolano", mostrando su amor incondicional por la patria de la "espuma, garzas y rosas". Esta característica dualidad cultural resonó con sus seguidores y lo convirtió en un embajador de la música caribeña.
A lo largo de su carrera, Rubby Pérez se destacó no solo por su potente voz, considerada "la voz más alta del merengue", sino también por su carisma y entrega en el escenario. A lo largo de los años, logró una conexión especial con el público venezolano, donde actuó en numerosas ocasiones y recibió discos de oro y platino por sus álbumes. Su música trascendió las fronteras, haciendo que su legado perdure más allá de las limitaciones geográficas, convirtiéndose en un referente del merengue internacional.
Durante la ceremonia fúnebre privada celebrada en el Teatro Nacional de Santo Domingo, su hija, Zulinka Pérez, emocionó a los presentes con una interpretación conmovedora. "A punto de estallar está mi alma por amor", expresó, evocando las memorias de su padre mientras cantaba fragmentos de las canciones que Rubby solía entonarle cuando era niña. Este momento íntimo resonó profundamente entre los asistentes que compartieron el dolor y la celebración de una vida llena de música y amor.
El presidente Luis Abinader y su esposa, Raquel Arbaje, se unieron para ofrecer sus condolencias a la familia del artista, mostrando su respeto y reconocimiento hacia una figura tan querida y respetada en la cultura dominicana. Su asistencia al homenaje subraya la trascendencia de Rubby Pérez en la historia musical del país. A la llegada del ataúd, además de las banderas que lo cubrían, se incluyó el sombrero y los lentes característicos del intérprete de "Volveré", elementos que simbolizan su estilo distintivo y su legado artístico.
La pérdida de Rubby Pérez es una tragedia que deja un vacío en el corazón de muchos, pero su música y su espíritu vivirán por siempre en la memoria de aquellos que tuvieron el privilegio de escuchar su voz y compartir momentos inolvidables a su lado. Mientras el Caribe dice adiós a este insigne merenguero, su legado continúa inspirando a nuevas generaciones de músicos y amantes de la música, reafirmando el poder del arte para conectar, sanar y recordar. En este difícil momento, la comunidad se une para honrar su vida y preservar la rica cultura musical que Rubby Pérez ayudó a construir.