Incremento de Intimidación a Activista Venezolana Andreína Baduel: Un Llamado a la Acción Internacional
Andreína Baduel, destacada activista venezolana por los derechos humanos, ha denunciado un alarmante aumento en las acciones de intimidación y vigilancia en su contra y su familia. Este incremento se ha producido desde que recibió medidas cautelares de protección de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Baduel, a través de sus redes sociales, hizo énfasis en que el hostigamiento comenzó a intensificarse tras la publicación de la resolución de la CIDH el 18 de junio. Situaciones de vigilancia, hostigamiento y amenazas hacia su familia han generado un contexto de temor en el que se siente en riesgo por las acciones del Estado.
El 18 de junio fue una fecha clave para Baduel, ya que en ese momento se hizo pública la comunicación oficial de la CIDH. Desde entonces, patrullas del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) se han apostado de manera constante frente a su hogar. Aunque las autoridades justifican su presencia como parte de un "operativo de seguridad," Baduel asegura que no ha recibido notificación sobre ninguna acción judicial relacionada con estas medidas. La persistencia de estos vehículos de vigilancia ha alimentado aún más la ansiedad y preocupación de la activista, quien siente que la protección que debería recibir se ha convertido en una amenaza constante.
El 25 de junio trajo consigo preocupaciones aún más serias para Baduel. Al salir de su hogar, avistó vehículos sin placas, que presuntamente pertenecen a organismos de seguridad del Estado, estacionados frente a su residencia. Según Baduel, estas camionetas son comúnmente asociadas con acciones de secuestro por parte de cuerpos de seguridad en el país. La activista mencionó que todos en Venezuela son conscientes del significado aterrador que tienen estas situaciones. Además, su hermana, Margareth Baduel, fue seguida por sujetos en motocicleta mientras la grababan, lo que eleva el nivel de temor por la seguridad de su familia.
Baduel describe estas acciones como parte de una "campaña de intimidación sistemática" que ha aumentado tras la muerte del general Raúl Isaías Baduel, su padre, bajo custodia estatal, y la detención arbitraria de su hermano, Josnars Adolfo Baduel, quien lleva más de cinco años en prisión. Estas experiencias de violencia y vulnerabilidad no son nuevas en el contexto venezolano, donde la represión de aquellos que denuncian violaciones a los derechos humanos es parte de un patrón sostenido por el Estado.
La activista enfatiza que estas medidas no son protección, sino intimidación y represalias. Baduel ha responsabilizado al Estado venezolano por cualquier acción que pueda atentar contra su integridad física o psicológica, así como la de sus seres queridos. Este llamado a la acción ha resonado con varias organizaciones y activistas que luchan por los derechos humanos, quienes están preocupados por la creciente escalada de hostigamiento que sufre la familia Baduel.
En respuesta a esta situación, la organización Justicia, Encuentro y Perdón expresó en un comunicado su profunda preocupación ante el hostigamiento y persecución que enfrentan las hermanas Baduel. La organización condenó el incumplimiento de las medidas cautelares otorgadas por instancias internacionales, subrayando que ignorar tales condiciones constituye una grave violación del derecho internacional. Este es un claro recordatorio de la importancia de la comunidad internacional en la defensa de los derechos humanos en Venezuela y la urgente necesidad de tomar acción para proteger a quienes se encuentran en riesgo.
Así, la situación de Andreína Baduel ejemplifica no solo la lucha personal de una activista valiente, sino también el contexto más amplio de la represión en Venezuela y la necesidad de apoyo internacional en la defensa de los derechos humanos. El incremento de la violencia e intimidación hacia defensores de derechos humanos pone de manifiesto la urgencia de abordar esta crisis y garantizar que tales violaciones no queden impunes.