Desaparición de José Riera: Clamor por Justicia y Derechos Humanos en Venezuela
La desaparición del joven político venezolano José Riera ha conmovido a su familia y la sociedad, sumergiéndolos en una angustiosa búsqueda que se prolonga por más de 11 días. Riera, miembro del partido Voluntad Popular y psicólogo de profesión, fue visto por última vez en Caracas. Su desaparición ha dejado a su hijo de 11 años y a sus seres queridos en una situación desesperante. Las hermanas de Riera han hecho un llamado a la comunidad internacional y a las autoridades, pidiendo a gritos por su vida y exigiendo conocer su paradero.
En una entrevista exclusiva con NTN24, sus hermanas expresaron su temor y frustración tras recorrer todos los centros de detención en Caracas sin obtener ninguna respuesta. Afirman que José no ha cometido delito alguno, argumentando que su única “falta” ha sido abogar por un cambio democrático en Venezuela. A pesar de que Riera había disminuido su actividad política en los últimos meses, su compromiso con Voluntad Popular lo convierte en un blanco potencial en el contexto de represión política que vive el país. “El hecho de pensar diferente ya es motivo de persecución”, señalaron sus familiares.
La salud de José Riera, que sufre de hipertensión, es motivo de creciente preocupación para su familia. Sus hermanas comparten el temor de que pueda estar siendo torturado, una práctica lamentablemente frecuente en estos casos. “Queremos pensar que no le están haciendo daño porque él no ha cometido ningún delito”, expresaron con desconsuelo. La angustiosa espera se convierte en una rutina desgastante, donde deben hacer colas ante organismos oficiales y buscar desesperadamente información, compartiendo su dolor con otros que también han perdido a sus seres queridos de manera similar.
El contexto político en Venezuela es cada vez más difícil, y en las últimas semanas se han reportado la detención de aproximadamente 40 críticos al régimen de Nicolás Maduro. Algunos de estos detenidos han sido liberados, pero la incertidumbre persiste. El 18 de julio de 2025, el gobierno anunció la excarcelación de 80 personas, incluyendo a 10 estadounidenses, en un intento de mejorar su imagen internacional. Sin embargo, este gesto de aparente buena voluntad contrasta con las prácticas represivas que continúan, lo que ha generado un creciente número de detenciones.
Human Rights Watch (HRW) ha emitido un informe que denuncia un “patrón de puerta giratoria” en el que se liberan presos políticos solo para ser reemplazados por nuevos detenidos. “El gobierno de Maduro lleva años aplicando un patrón de ‘puerta giratoria’”, criticó Juanita Goebertus, directora de esta ONG. Este ciclo perpetuo de represión y detención genera un clima de miedo y angustia en la población, que vive constantemente bajo la sombra de la persecución.
La situación de José Riera es solo un ejemplo más de la crisis de derechos humanos que vive Venezuela. Las voces de sus familiares, que luchan incansablemente por su vida, resuenan como un llamado urgente a la comunidad internacional para que no se acueste en el silencio. La protección de los derechos humanos y la defensa de la democracia son esenciales en la lucha por un futuro mejor para Venezuela. La familia Riera, junto con muchas otras, espera que la justicia prevalezca y que su ser querido regrese sano y salvo a casa.