Título: Llamado Urgente a la Protección de los Defensores de Derechos Humanos en Venezuela
El Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos, una iniciativa conjunta de la Federación Internacional por los Derechos Humanos (FIDH) y la Organización Mundial Contra la Tortura (OMCT), ha emitido un llamado urgente para investigar el hostigamiento contra Andreina y Margareth Baduel. Estas valientes defensoras de derechos humanos son miembros activos del Comité por la Libertad de los Presos Políticos (ClippVe), donde han estado haciendo un trabajo vital para visibilizar las injusticias en Venezuela.
La situación se ha tornado crítica desde el 18 de junio de este año, tras una rueda de prensa celebrada en la Universidad Central de Venezuela. Durante este evento, el ClippVe documentó y denunció violaciones de derechos humanos cometidas contra personas detenidas por motivos políticos. Desde entonces, Andreina Baduel ha sido objeto de vigilancia, seguimientos, y ha visto cómo funcionarios se han presentado de manera intimidante frente a su vivienda. Por su parte, Margareth ha enfrentado acosos similares, incluyendo registros no autorizados y seguimientos por parte de vehículos con funcionarios encapuchados. Esto pone de manifiesto el alto riesgo que corren ambas defensoras, así como su familia.
La preocupación por la seguridad de la familia Baduel ha llevado al Observatorio FIDH-OMCT a documentar estos ataques y hacer un llamado al Estado venezolano. Es imperativo que las autoridades cumplan con las medidas cautelares emitidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) el pasado 12 de junio, en favor de Andreina Baduel. La falta de acción del gobierno puede considerarse una violación a los derechos humanos y un índice de la persecución sistemática hacia quienes defienden la justicia en el país.
Desde el ClippVe, se ha manifestado un pleno respaldo al llamado del Observatorio y se ha denunciado que estas acciones no solo buscan silenciar a las defensoras, sino también intimidar a las víctimas que necesitan apoyo. El comité sostiene que tales acciones son una estrategia para debilitar el crucial trabajo de asesoría y acompañamiento que se realiza en pro de los derechos humanos en Venezuela. Esta situación, inaceptable en un estado democrático, debe ser urgentemente atendida.
Además, el ClippVe ha hecho un llamado a la comunidad internacional para que no solo observe, sino actúe en la exigencia de protección para quienes están en la primera línea de defensa de los derechos humanos en Venezuela. “Defender derechos no puede seguir siendo un riesgo. El silencio estatal también es violencia”, enfatizan los miembros del Comité. Esta exhortación es un grito de ayuda que trasciende fronteras y busca generar conciencia sobre la situación alarmante en que se encuentran quienes luchan por la justicia.
En conclusión, la defensa de los derechos humanos en Venezuela se encuentra en una encrucijada. Las agresiones y la represión sistemática contra defensoras como Andreina y Margareth Baduel son ejemplos claros de la difícil realidad que viven muchos en el país. La protección y el respaldo de la comunidad internacional son cruciales para garantizar que quienes defienden estos derechos puedan hacerlo sin temor a represalias, y que el gobierno venezolano rinda cuentas por sus acciones. Solo a través de la colaboración y la denuncia se podrá avanzar en la lucha por la justicia y la dignidad en la nación.