Informe de Desplazados Forzados en el Mundo: Situación Actual y Contexto Latinoamericano
El desplazamiento forzado de personas ha alcanzado cifras alarmantes a nivel global. Según el último informe de ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, aunque el número de desplazados disminuyó levemente de 123,2 millones a 122,1 millones a principios de 2025, estas cifras son "insosteniblemente altas". La situación es especialmente preocupante en Venezuela, que lidera el ranking mundial de refugiados y personas que requieren protección internacional.
La notable reducción en el número de desplazados se ha atribuido principalmente al regreso de cerca de dos millones de sirios a su país tras el derrocamiento de Bashar al Assad, a lo largo de más de diez años de guerra. Sin embargo, esta ligera mejora contrasta con el incremento de personas en busca de refugio desde Venezuela, que se ha convertido en el epicentro de la crisis migratoria en América Latina y el Caribe. Con 370,200 refugiados y 5,9 millones de personas que necesitan protección, los datos muestran un aumento del 2% respecto a 2023.
Cerca del 88% de los refugiados venezolanos se encuentran en países de América Latina. Colombia destaca como el país que alberga la mayor población de refugiados con 2,8 millones de venezolanos, ocupando el tercer lugar a nivel mundial. Perú, Brasil, Chile y Ecuador son también receptores significativos de migrantes, con cifras que varían entre 440,000 y 1,1 millones de refugiados. En Estados Unidos, los venezolanos han sido protagonistas en la solicitud de asilo, con 116,700 solicitudes formalizadas en el primer semestre de 2024.
El régimen de Nicolás Maduro ha reaccionado ante estas cifras, rechazando el informe de ACNUR y denunciando que las cifras presentadas son "manipuladas" y un intento de atacar a la soberanía nacional. La cancillería venezolana critica a la ONU, alegando que su rol se ha desviado hacia la propaganda política y no hacia la búsqueda de soluciones humanitarias efectivas.
De acuerdo con el informe, los venezolanos ocuparon el segundo lugar en solicitudes de asilo globales el año pasado, superados solo por los sudaneses. Estados Unidos, en particular, ha registrado un aumento notable en las solicitudes de asilo, con 729,100 registrados en el primer semestre de 2024, la mayoría provenientes de países latinoamericanos. Los conflictos en curso en diversas regiones, como Sudán, Birmania y Ucrania, continúan siendo los principales factores que alimentan los desplazamientos forzados en el mundo.
ACNUR también proyecta un posible retorno de desplazados en el futuro cercano, estimando que hasta 1,5 millones de sirios que residen en el extranjero y dos millones de desplazados internos podrían haber regresado a su hogar para finales de 2025. Esta proyección, sin embargo, depende de la evolución de las condiciones de seguridad y estabilidad en cada uno de los países afectados.
En resumen, la situación de los desplazados forzados en el mundo sigue siendo crítica, con particular énfasis en el impacto de la crisis venezolana. Los países de acogida en América Latina han asumido la carga humanitaria, pero la respuesta internacional debe intensificarse para abordar las causas subyacentes y garantizar la protección y el bienestar de millones de personas vulnerables.