La Tensión en Gaza: Un Conflicto en Escalación
La situación en la Franja de Gaza ha vuelto a intensificarse significativamente en las últimas semanas. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ha dado la orden de movilizar a 60,000 reservistas. Esta decisión se produce tras la autorización de un plan militar cuyo objetivo es tomar Ciudad de Gaza, un movimiento que Hamas ha denunciado como un “desprecio flagrante” hacia los esfuerzos de mediación que buscan establecer una tregua. Este conflicto ha escalado considerablemente desde que Hamas lanzó un ataque en Israel el 7 de octubre de 2023, iniciando así un ciclo de violencia que ha sumido a ambas partes en un caos humanitario.
Desde el inicio de este nuevo capítulo de conflicto, el ejército israelí ha logrado controlar aproximadamente el 75% de la Franja de Gaza. Sin embargo, las hostilidades han tenido un alto costo humano. Según informes de la Defensa Civil de Gaza, los ataques israelíes han dejado a 21 personas muertas en las últimas 24 horas, y los combates continúan en el sur del territorio. Estos informes son difíciles de verificar de manera independiente debido a las restricciones impuestas a los medios de comunicación en la región.
La operación militar en Ciudad de Gaza apunta a eliminar las capacidades de Hamas, que se resistía en los sectores de Zeitún y Al Sabra. Las autoridades militares israelíes han asegurado que esta operación será “progresiva, precisa y selectiva”, con el fin de desactivarse en las áreas donde Hamas todavía mantiene fuerzas. Se anticipa que las operaciones continuarán al menos hasta 2026. Este aumento de la actividad militar está diseñado para neutralizar las capacidades de combate de Hamas y liberar a los rehenes en manos del grupo.
En medio de esta escalada militar, Hamas señaló recientemente que había aceptado una propuesta de tregua presentada por mediadores de Egipto, Catar y Estados Unidos. Esta iniciativa, que incluye el intercambio de 10 rehenes por un alto el fuego de 60 días, ha sido ignorada hasta ahora por Israel. Un alto funcionario israelí dejó claro que su postura no ha cambiado, insistiendo en la liberación de todos los rehenes de forma simultánea, lo que ha complicado aún más las posibilidades de un acuerdo pacífico.
La gran cantidad de pérdidas humanas del lado palestino, que según informes de la ONU ascienden a más de 62,000 personas, ha suscitado preocupación internacional, aunque Israel ha argumentado que la ayuda humanitaria está siendo permitida. Al mismo tiempo, las tensiones han aumentado también en Cisjordania, donde Israel ha aprobado un plan para construir 3,400 viviendas, lo que ha sido criticado por impedir la creación de un estado palestino sostenido. La Autoridad Palestina y múltiples organismos internacionales han instado a Israel a reconsiderar estas acciones, advirtiendo sobre la posible transformación de la región en una “verdadera prisión”.
En resumen, la escalada del conflicto en Gaza plantea preguntas sobre el futuro de la región y la posibilidad de una resolución pacífica. A medida que los combates continúan y las pérdidas humanas aumentan, la comunidad internacional observa de cerca, buscando soluciones que permitan restablecer el diálogo y la paz en un entorno marcado por el desasosiego y la discordia. La única certeza es que las decisiones que se tomen en las próximas semanas serán cruciales para determinar el rumbo de esta prolongada crisis.