La Fragilidad de las Democracias Modernas y el Avance del Autoritarismo: Reflexiones de Edmundo González en la Cumbre Internacional de Madrid
Edmundo González Urrutia, el presidente electo de Venezuela, ha enfatizado la crucial importancia de la defensa de la democracia y del Estado de derecho, especialmente en un contexto donde el autoritarismo parece estar en ascenso. Durante la inauguración de la Cumbre Internacional organizada por el Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid, González instó a todos los actores institucionales a asumir su papel en la preservación de los valores democráticos. Su discurso resonó con fuerza en una audiencia compuesta por juristas, académicos y líderes de toda Iberoamérica, abriendo un debate sobre el futuro del derecho y de la democracia en un mundo cada vez más desafiante.
En su intervención, González subrayó que "la justicia no puede ser sometida a intereses coyunturales ni convertirse en una herramienta de dominación política". Esto resuena fuertemente en el contexto de Venezuela, donde la independencia del poder judicial ha sido severamente comprometida. Para el presidente electo, un sistema judicial independiente representa la última línea de defensa de la democracia. Este mensaje es especialmente relevante en un país que ha sido testigo de un colapso institucional, donde las instituciones han sido manipuladas para servir a agendas políticas en lugar de proteger los derechos de los ciudadanos.
La elección de González como orador principal de la cumbre no es casual. Eugenio Ribón, decano del Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid, argumentó que Venezuela es un caso extremo de deterioro institucional en el mundo contemporáneo. La cumbre, que reunió a más de 50 líderes y expertos jurídicos, se propuso abordar los desafíos actuales que enfrenta la democracia en Iberoamérica y en el resto del mundo. Este contexto de diálogo se convirtió en una plataforma para reflexionar sobre cómo la reconstrucción del ámbito jurídico es esencial para el establecimiento de democracias sólidas y funcionales.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, también se unió al coro de apoyos, reafirmando el compromiso de la ciudad con el proceso democrático en Venezuela. Calificó a González como el presidente legítimo de la nación y aseguró que "el pueblo venezolano tiene en Madrid un aliado hasta alcanzar la democracia plena". Este respaldo es crucial para los venezolanos que luchan por la recuperación de su país y su democracia, así como para aquellas naciones de la región que enfrentan retos similares.
En su cierre, González enfatizó que "sin justicia no hay libertad y sin Estado de derecho no hay democracia sostenible". Este llamado a la responsabilidad se hace eco en un momento en que la crisis de la democracia universal está en el centro del debate. La sostenibilidad de cualquier sistema democrático radica en su capacidad para garantizar justicia, igualdad y derechos para todos sus ciudadanos. La cumbre no solo sirvió como un espacio de reflexión, sino como un recordatorio de que el tiempo de actuar es ahora.
A medida que el autoritarismo continúa avanzando en diversas partes del mundo, la necesidad de un compromiso renovado hacia la defensa de la democracia es más urgente que nunca. Edmundo González se erige como una voz de esperanza en este contexto, recordando a sus colegas y ciudadanos que la vigilancia y el compromiso son fundamentales para mantener la democracia. La responsabilidad recae en todos, desde las instituciones hasta los ciudadanos, de no dar por hecho lo que ha sido arduamente ganado y de luchar por un futuro donde prevalezca la justicia y el Estado de derecho. Así, la Cumbre Internacional del Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid se convierte en un pilar en la lucha por la democracia en Iberoamérica y más allá.