Evaluación y Respuesta a las Inundaciones en Alto Apure
En un despliegue significativo de apoyo, autoridades del Gobierno nacional y regional se trasladaron hoy a la región del Alto Apure. Esta acción se llevó a cabo para evaluar la gravísima situación provocada por las recientes lluvias, que han dejado a su paso un panorama desalentador en diversas comunidades. Algunas de las zonas más afectadas incluyen 13 de septiembre, Simón Bolívar, Cavanerio, La Esperanza, Barra Vieja y calle La Garabato en Los Corrales. La visita fue encabezada por el vicepresidente sectorial de Obras Públicas y Servicios, M/G Jorge Márquez Monsalve, junto con los ministros de Hábitat y Vivienda, Raúl Paredes, y Obras Públicas, Juan José Ramírez, quienes acompañaron al gobernador de la entidad, Wilmer Rodríguez.
Durante este recorrido, el gobernador Rodríguez enfatizó la firme disposición del Gobierno tanto nacional como regional para brindar apoyo en estos momentos difíciles. "Desde aquí, el gobierno revolucionario está con el pueblo, escuchando y dando respuestas contundentes a esta crisis", afirmó Rodríguez. En particular, resaltó la movilización de un transformador que será crucial para evacuar el agua acumulada en las zonas inundadas y el envío de equipamiento destinado a reparar las graves afectaciones.
La gravedad de la situación quedó evidenciada al constatar que más de 1.200 familias han sufrido las consecuencias de las inundaciones en la región. El M/G Jorge Márquez Monsalve subrayó la urgencia de la atención en las comunidades afectadas. Al encontrarse en el municipio Páez, donde las aguas estaban un metro veinte centímetros por debajo del nivel del río Sarare, destacó que se estaban atendiendo a tres comunidades con aproximadamente 130 casas completamente inundadas.
En ese contexto, el vicepresidente sectorial mencionó que se habían conseguido equipos de bombeo y se esperaba evacuar el agua en un plazo de 24 a 32 horas. Reconoció que la situación es crítica y que la prioridad del gobierno es atender todas las necesidades de las familias afectadas. Estos esfuerzos incluyen no solo la evacuación del agua, sino también el suministro de alimentos, la reparación de viviendas, el mantenimiento de las vías y el apoyo con electrodomésticos, destacando así un enfoque integral en la respuesta a la crisis.
Además, el ministro de Hábitat y Vivienda, Raúl Paredes, anunció la activación inmediata del protocolo de recuperación. Este protocolo no solo implica la refacción de las viviendas dañadas, sino que también contempla la posibilidad de reconstrucción en caso de ser necesario. Paredes explicó que se trabajará de manera cercana con los beneficiarios para evaluar los daños y comenzar de inmediato las labores de recuperación, resaltando la importancia de la colaboración entre el gobierno y las comunidades afectadas.
En definitiva, las autoridades están tomando medidas inmediatas para enfrentar esta emergente crisis, priorizando la atención a las familias y asegurando que el gobierno está presente en la búsqueda de soluciones. El compromiso del Gobierno es claro: actuar de manera eficaz y oportuna para atender las necesidades de la población afectada por las inclemencias del tiempo y garantizar una pronta recuperación de las comunidades devastadas por las recientes inundaciones en el Alto Apure.