El pasado viernes 15 de agosto, la juventud socialista de diferentes estados de Venezuela se concentró en distintas Plazas Bolívar para expresar su rechazo ante las recientes agresiones de Estados Unidos hacia el presidente Nicolás Maduro. En Portuguesa, los miembros de la Juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela (JPSUV) calificaron la oferta de recompensa de 50 millones de dólares por la captura del mandatario como un “acto de piratería imperial”. En un discurso en Guanare, Jairelys Martínez enfatizó que cada agresión contra Maduro fortalecerá la unión cívico-militar-policial.
La juventud de Monagas también reafirmó su compromiso con la defensa de Venezuela, destacando la importancia de la participación de los jóvenes en la construcción del país. Génesis Canelón, coordinadora estatal del JPSUV, subrayó el patriotismo y la voluntad de la “generación de oro” para trabajar por la paz y los logros alcanzados durante la revolución. Este sentimiento de unidad se ha intensificado, y los jóvenes están decididos a enfrentar los desafíos impuestos desde el exterior.
En Falcón, la juventud se congregó en el complejo deportivo recreacional Hugo Chávez de Coro para manifestar su apoyo a Maduro y su disposición a defender la soberanía nacional. La dirigente juvenil María Colina rechazó categóricamente la recompensa ofrecida por el gobierno estadounidense y recordó que existen organizaciones internacionales que respaldan la imagen de Venezuela como un país libre de narcotráfico. Colina resaltó que las agresiones no solo buscan desestabilizar al gobierno, sino también al pueblo venezolano.
Las concentraciones en varias regiones resaltan la fuerza de la juventud en la lucha por la independencia y autodeterminación de la nación. Los jóvenes están claros en que cualquier ataque contra el presidente Maduro es un ataque al pueblo venezolano en su conjunto. Esta determinación se ha visto reflejada en las intervenciones durante las manifestaciones, donde se han levantado voces enérgicas dispuestas a defender los logros de la revolución bolivariana.
La participación activa de la juventud en estos eventos refuerza el papel fundamental que desempeñan en la política nacional. Con la historia de su país en juego, muchos jóvenes consideran que su responsabilidad es no solo proteger a Maduro, sino también garantizar la continuidad de los derechos y avances sociales alcanzados en años de lucha. La visión de unidad cívico-militar-policial se convierte en un lema en la defensa de la soberanía, resaltando la importancia de trabajar juntos ante los ataques externos.
Finalmente, la movilización de la juventud venezolana en diferentes estados del país muestra una clara postura en defensa del gobierno de Nicolás Maduro y los principios de la revolución bolivariana. En cada concentración, se reafirma el compromiso de construir un país donde la paz y la dignidad del pueblo sean resguardadas. El mensaje es claro: en la lucha por la soberanía, la juventud se mantiene firme y decidida.