Los Juicios de Cobranza en Condominios en Venezuela: Una Realidad Emergente
Los juicios de cobranza por deudas de condominio han comenzado a dominar los tribunales de Venezuela, transformándose en un mecanismo clave para abordar la morosidad de los propietarios. Motivados por instrucciones del Tribunal Supremo de Justicia, estos procesos judiciales pueden culminar en transacciones conciliatorias o, en casos más extremos, en embargos y remates de inmuebles. Abogados especializados en propiedad horizontal advierten que esta tendencia representa una importante herramienta para las administradoras de condominios al enfrentar deudas morosas.
El abogado Fernando A. León Poleo ha confirmado que los juicios de cobranza están ganando terreno en todo el país. Asegura que, si bien estos procedimientos pueden llevar a la conciliación entre las partes, también están diseñados para ejercer presión sobre los deudores. León Poleo señala que ha estado involucrado recientemente en un caso de embargo preventivo en el área metropolitana de Caracas, lo que pone de manifiesto la efectividad de este mecanismo para la recuperación de deudas.
Es fundamental que los administradores de condominios adopten un enfoque estratégico en cuanto a la gestión de la morosidad. León Poleo sugiere que no se debe dedicar más del 10% de los esfuerzos de la administradora a la cobranza de deudas. A partir de tres meses de morosidad, es recomendable transferir el caso a un bufete de abogados especializado. Esto permite a la administración concentrarse en otras áreas importantes del edificio, para así mantener un equilibrio en la gestión.
Por su parte, la abogada Marialejandra Parra enfatiza la importancia de iniciar con un llamado a la conciencia. Si un propietario se encuentra en una situación de morosidad, se sugiere que se acerque a la junta de condominio o a la administradora con el fin de establecer un acuerdo de pago. La proactividad es crucial, y la administradora, aunque no sea su función principal, debe emprender acciones iniciales de cobranza a través de llamadas y correos electrónicos. Un análisis constante del estado de cuentas es vital para actuar a tiempo.
Parra también destaca que, al ingresar a un edificio con antecedentes de buen pago, cualquier indicio de deudas atrasadas debe ser tratado de inmediato. La comunicación efectiva con los propietarios puede evitar que la situación se deteriore y, así, minimizar la necesidad de llegar a instancias legales. La prevención y el diálogo son, en este sentido, herramientas esenciales para mantener la salud financiera del condominio.
Finalmente, los juicios de cobranza por deudas de condominio no solo reflejan un problema creciente en Venezuela, sino que también ofrecen una oportunidad para que las administradoras implementen estrategias más efectivas. Aprovechar las directrices del Tribunal Supremo de Justicia y contar con el apoyo de abogados especializados podría ser clave para transformar esta problemática en un proceso de gestión más eficiente y menos conflictivo. De esta forma, se podría mitigar el impacto de la morosidad en el sector inmobiliario y asegurar la sostenibilidad económica de los condominios.













