Luis Caldera: Primer Gobernador Indígena de Zulia y Su Compromiso con la Comunidad
Luis Caldera, líder de la comunidad indígena Wayúu, se ha convertido en un hito histórico al ser el primer gobernador indígena del estado Zulia. Su toma de posesión, celebrada ante la Asamblea Legislativa, fue un acto emblemático que atrajo la atención del presidente Nicolás Maduro y la primera dama, Cilia Flores. Este evento marca un cambio significativo en la representación indígena en el gobierno, señalando el compromiso de las comunidades originarias con el desarrollo político del país.
En su discurso inaugural, Caldera subrayó su herencia indígena como un valor central de su gestión. Reiteró la importancia de construir una gran familia en las 576 comunas del Zulia, enfatizando que su mandato estará basado en el legado del Comandante Hugo Chávez. La inclusión y la participación comunitaria serán piedras angulares de su gobierno, lo que refleja un enfoque renovado hacia el servicio público que prioriza la ética y la moral.
El nuevo gobernador se comprometió a gobernar con y para la gente, haciendo un llamado a la colaboración ciudadana desde el inicio de su gestión. "Vengo a gobernar para todas y todos," afirmó, enfatizando que su administración estará abierta al diálogo y a la participación activa de los ciudadanos. Esta apertura busca no soloér visitantes locales, sino también reiterar el valor de la transparencia en la gestión pública.
Además de la gobernanza inclusiva, Caldera ha destacado la necesidad de revitalizar la economía local. En su discurso, se refirió a su compromiso con la "producción económica" y la importancia de las "7 transformaciones" para contribuir al desarrollo del estado y del país. Este énfasis en la economía refleja una visión pragmática donde el progreso se logra a través del trabajo conjunto y la innovación en el ámbito productivo.
Caldera también anunció una reingeniería completa en la gobernación para cumplir con las demandas de las comunidades. Este enfoque proactivo sugiere un cambio en la forma en que se traduce la política en el día a día, donde las decisiones se toman desde los territorios y se basan en las realidades que enfrentan los ciudadanos. El nuevo modelo de gestión busca ser más accesible y sensible a las necesidades locales.
Por último, la interacción constante con las comunas será clave en su gestión. Caldera ha resaltado el diálogo como una herramienta fundamental para mantener el contacto directo con las comunidades y garantizar que sus necesidades sean atendidas. Esta estrategia no solo fortalecerá la relación entre la gobernación y los ciudadanos, sino que también permitirá un gobierno más efectivo y comprometido, donde la voz del pueblo es realmente escuchada y contemplada en las políticas públicas.
